martes, 3 de mayo de 2011

Desexilio XI:Hotel Santa Mónica(Bsas 1998)


(A la memoria del Edu Carvallo:Un ser humano)*


Al Edu lo conocí en el Hotel Santa Mónica,barrio de Almagro.
Era pelado y barbudo,tenía cicatrices circulares en las sienes,como rulos dibujados por un niño.
Se había querido matar,hace tiempo,con una 22,y no tuvo suerte.
Era un buen tipo,buenazo,un predicador de la teología de la liberación.Visitaba a los presos de la Tablada(sentía especial admiración por el padre Antonio Puigjané)y a veces lo acompañaba yo,atemorizado todavía por ese suceso recóndito del tamaño del televisor,que en mi casa despertaba murmullos,lágrimas,discusiones,insultos y temores.Era una "cosa de locos",era"un error",era "el final",era una "hijaputez",era"lo que faltaba",no se sabía en fin qué carajo era,pero ahí estaba yo,años después,con el Edu,delante del pelado Gorriarán tomando mate en Villa Devoto.
Al Edu lo querían todos,los jueves iba a la plaza,y las Madres lo cobijaban,lo tomaban de las manos,y le acariciaban la cabeza(el se agachaba un poco para que ellas alcanzaran el globo)les bastaba mirarlo largamente para saber cómo estaba,y él sentía en su craneo,ese sudor,que le devolvía el aliento.
También él nos reparaba a nosotros.El bulo donde vivía,frente al mío,era el monasterio de los deshauciados.
Entraba el negro Rolo,que era repositor de supermercados y tocaba el violín(era pésimo con el instrumento).Traía un tupper grasoso,que cuando lo abrías,salían disparadas las cucarachas de adentro.Era mejor que esté con nosotros,no se escuchaban las quejas de su mujer.
Entraba el loco David(vivía conmigo)por esos días andaba rengueando con los riñones rotos.Había conseguido ingresar solito a la feria del libro,en plena inauguración e insultar al presidente Menem.
Al grito de Hijo de puta,Cipayo,Traidor!!...interrumpió el discurso,con la foto de su madre asesinada durante la dictadura y una bandera argentina.
No le hagan nada,dijo Menem,él también es Argentino.
Los custodios lo querían liquidar,y no se privaron de nada.Lo metieron en una camioneta,y le dieron duro,con el puño cerrado,y con manoplas.
El Edu le compraba los medicamentos,y lo acompañabamos al baño,porque orinaba sangre.El encargado del conventillo nos puteaba porque no paraban de llamar los periodistas,y él se tomaba su tiempo para responderles(en el medio de la conversa citaba a John William Cooke y a Santucho.No existían los celulares,y era el único teléfono que había allí,todo el mundo se quejaba).
David hablaba perfecto el sueco y el inglés,era traductor y corrector,como su padre,quien fué discípulo de Raúl Gonzalez Tuñón,y estuvo chupado en Uruguay.
Tenía mucho éxito con las mujeres,pero a veces se le iba la mano con la ginebra y lo hallábamos entre los charcos de la calle Boedo,todo desnudo,y sonriente.
El Edu nos hablaba bajito y pausado,un poco por religiosidad y otro tanto por las secuelas del disparo(imaginaba yo,que sus neuronas y la célula de Schwann estaban pegadas con cinta aisladora).
Todos nos sentábamos alrededor de nuestro Chamán,de nuestro sacerdote,de nuestro cacique Edu Carvallo.
Incluído rafa"el bebé"(pelado y gordo),que vestía camisas hawaianas y fumaba mentolados,volvía de vender libritos para colorear en los subtes,y lo puteaba a David,atragantado con una ensalada:pero cómo no tenés conciencia...nos estás mandando al muere,menen es menen y nos va a mandar la yuta...si,si,a mi vieja también la chuparon,y sin embargo no da...
Todo bajo el candoroso y sosegado cuarto del Edu,donde se organizaba el puchero común,juntabamos los envases de birra,y salíamos a ocupar las habitaciones vacías,para recibir a nuestras chicas(le afanábamos las llaves al encargado).

La última vez que lo ví al Edu,fué en un neurosiquíatrico,tuvo un brote,pero le dieron el alta enseguida.Supe que hizo un viaje por el sur,con su novia y su guitarra,y nada más.
Algunos dicen haberlo visto en las costas de Chubut,brotado,arrojando piedras al mar,y otros dicen que lo detuvo la policía.
Desapareció.
Nadie sabe si se suicidó o lo mataron.
De David se dice que es padre de familia,que durante mucho tiempo vivió en la calle vendiendo sahumerios,y sobrevivió.
Al negro Rolo lo encontré una tarde,en la esquina de Paraná y Lavalle,iba de traje y corbata,y cuando le pregunté qué hacía,me guiñó un ojo,y se fue volando.
Con Rafa actúamos juntos en los bondis,me acompañaba con la viola,y nos mudamos juntos a una siompe de Constitución.Ahora nos escribe desde las playas de Minas Gerais,Brasil,y cuenta que vive de su música.
Cada uno de nosotros se fue
con la música,a otro parte.

*Por respeto a los amigos,a excepción del Edu,a nadie mencioné con su verdadero nombre.